Equipos, equipos,.........., equipos. Hace tiempo que escuchamos lapalabra asociada a las metodologías de trabajo utilizadas por las empresas.
"Somos un equipo", "trabajo en equipo",....."Debemos funcionar como un verdadero equipo".
Cuando las compañías a través de sus dirigentes comienzan a utilizar este tipo de frases, aparecen las señales de alerta sobre los sistemas operativos que rigen en ellas.
El trabajo en equipo puede dejar de ser un mito, si realmente se desea provocar el cambio cultural. Esto no es sencillo por cuanto los procesos de cambio llevan un tiempo que en general no se esta dispuesto a esperar.
Cuando una compañía decide pasar del sistema (individual – grupal) al sistema (equipo – redes), lo primero que uno puede observar son las resistencias de la propia dirigencia a través de sus actos muchas veces no conscientes.
¿Como poder mostrar espíritu de equipo cuando las reuniones de directorio no funcionan como tales?.
Uno de los pilares del liderazgo es la predica del ejemplo, entonces, ¿sería posible a través de esta idea insuflar el espíritu de equipo a un grupo cuando la dirección funciona como sistema (individual – grupal), y no como un sistema (equipo – redes)?
